domingo, 18 de octubre de 2009

Plantas y Animales, Como alimentos y compañeros
(Sin ellos moriríamos de hambre y de soledad)
Manuel C. Martínez M.
18 oct. 09
Estamos convencidos de que las mejores pinturas de los mejores artistas son los paisajes donde sus protagonistas son árboles y arbustos, yerbas, hojas, aves, peces, canes, gatos, vacas, caballos y mariposas.
Convencidos también de que los modernos apartamentos familiares de propiedad horizontal serían cascarones cavernosos si en sus paredes no colgaran las pinturas, y si estas son “impresionistas” mucho mejor porque sus creadores terminan recogiendo en ellas todo el caluroso dinamismo de la vibrátil luz, única forma de reflejar físicamente la realidad material del mundo exterior.
Nos han acostumbrado a una versión idealista del mundo donde la Flora y la Fauna aparecen como objetos y no como sujetos. Y todo parece encajar armoniosamente, ya que la autovisión clasista hace que unos hombres no miren a los otros como reflejos de sí mismos sino como extraños.
Por esas contradicciones, los vegetarianos aducen no comer cadáveres, pero se alimentan de vegetales, por eso descuidamos el jardín de las calles, reducimos la vegetación, los peces y mamíferos en general, y hasta hoy en la China moderna se alimentan con fetos abortados, y en América se come sintéticos programados.
Cuando paseamos por las calles vacías, libres de esculturas, carentes de árboles y arbustos, y ni siquiera vemos un hambriento perro callejero, pareciera que estamos solitarios en un apelotonado mundo donde además de hambre estaríamos muriendo de soledad.

jueves, 15 de octubre de 2009

La Administración Pública debe Sincerar sus Nóminas Laborales
Manuel C. Martínez M.
15 oct. 09
Todos los gobiernos nacionales, estadales y municipales venezolanos, particularmente los “democráticos”, se acostumbraron inercialmente a no honrar oportunamente sus pasivos sociales, a entrar en mora sostenida y creciente por concepto de una que otra obligación debidamente contraída con los funcionarios públicos. Y lo han hecho no necesariamente por falta de recursos financieros, de ninguna manera, sino porque al gobierno central de ayer y hoy no les ha convenido ni jamás se han preocupado oportunamente por actualizar ni siquiera semestralmente esos pasivos que suelen crecer, crecer y crecer sin freno ni control social popular alguno.
Con el uso de semejante método administrativo no es difícil reconocer un sobreprecio contable que incrementa constante e irresponsablemente la Deuda Social original del Fisco Nacional. Con semejante método cunde el descontento popular, y por lo general la infidelidelidad y la impostura populares se hacen crónicas frente a todos los gobernantes que van sucediéndose al frente de semejantes procedimientos administrativos y fiscales.

Buena parte de la Deuda Pública Nacional (DP) responde a esa olímpica manera de operar: El nuevo gerente gubernamental sigue automáticamente la costumbre hallada en su personal y que fue propia de sus antecesores, se muestra ortodoxo, no introduce reforma alguna, pero la DP sigue creciendo y con ello la desidia popular nos ha llevado hasta convertirnos en verdaderos tartufos morales de cuanto gobierno aparece con cada nueva elección popular.

Es que los ciudadanos tampoco tienen razón alguna para mostrarse sinceros en la administración de sus votos políticos. Hoy se lo dan a Fulano y mañana al propio enemigo de este. Es su manera de pasarle factura a cuanto administrador público transita por Miraflores, quien deja todo como lo encontró, con lo cual el funcionario público termina sufriendo el castigo que debería aplicarse severamente a los irresponsables administradores que el país ha incorporado en y para el manejo de unas insinceras nóminas durante el último 1/2 siglo.

La insinceridad de las Nóminas Nacionales venezolanas se manifiesta de la siguiente manera:
1.- Oportunos y religiosos descuentos semanales y mensuales por concepto de Seguro Social, de Política Habitacional, de aportes a la Caja de Ahorros así como de todas las demás cuotas en favor de Sindicatos, gremios varios y de Seguros privados, y

2.- Tales descuentos no son enterados ni transferidos con la misma religiosidad ni automáticamente a los beneficiarios de tales descuentos. Por el contrario, esos descuentos obligatorios alivian los desembolsos semanales y quincenales de los organismos públicos correspondientes. Estos empiezan a disponer de ellos con lo cual se acumula pasivos contra el Fisco nacional, y este suele terminar volviendo a autorizar nuevas partidas presupuestarias para parcialmente pagarles a los funcionarios públicos afectados con esa mora, y lo hace sólo como corolario de fogosos debates y pugnas entre sindicalistas y políticos quienes generalmente terminan convirtiendo una irresponsabilidad administrativa gubernamental en conquistas de votos para ambas partes, ya que sindicalistas y gobernantes usan semejantes, deliberadas y acostumbradas moras como fructíferas banderas para sus promisiones electoreras.

Se trata, pues, de toda una consuetudinaria y enquistada estrategia aplicada por descarados pillos de la cosa pública, más que de honrados funcionarios. No pedimos disculpas por estos peyorativos porque consideramos que estamos simplemente reflejando la calidad moral de unos funcionarios públicos cuyos ascensos al poder nadie duda que han estado respondiendo más a intereses grupales partidistas que a la sana obligación constitucional a la que deben su razón de ser para semejantes y elevados caragos gubernamentales.

martes, 13 de octubre de 2009

Reformas Estadísticas del PIB
(Sugeridas por el Nobel Stiglitz)
Manuel C. Martínez M.
13/10/2009
De entrada: no existen Nobelados antiimperialistas; por el contrario, son sus apologistas de avanzada. Los Nobeles son el máximo reconocimiento académico de los aportes teóricos personales y experimentales asumidos por algunos bien escogidos investigadores sin que estos posiblemente ni siquiera retribuyan unas simples “gracias” a sus respectivos colaboradores, como secretarias, ayudantes varios, y colegas inclusive no tomados en cuenta para la consignación de esas pecuniarias premiaciones.
El explosivo desarrollo de las “ciencias” fácticas y de las fuerzas productivas o laborales de los últimos 250 años ha sido burgués por excelencia, germinaron bajo la férula del capitalismo. Este sistema ha sido el más conspicuo beneficiario de todos los aportes tecnológicos derivados de ellas en materia de productividad de una riqueza material que, paradójicamente, ha terminado en los bolsillos de unos, y contribuido a la mayor pobreza humana conocida hasta ahora. Bien, precisamente, del seno de gente burguesa e investigadora nació la premiación nobelada, y de allí que sus objetivos jamás podrían ser contrarios a la preservación del sistema que les sirvió de cuna y alimento.
Por favor, no sigamos confundiendo pobreza humana con rezagos tecnocientíficos. Actualmente existen comunidades de personas que llevan una mejor vida que la experimentada diariamente por millones de esos modernos asalariados y exasalariados que sobreviven miserablemente en la periferia y penumbra de las grandes urbes de New York, México, Londres, París, etc.
Entrando en el tema que nos ocupa, los estadísticos, como el PTB, PIB, PIN, VA, (VAN, según mi personal aporte), “CI”, IMI, etc., son indicadores macroeconómicos de aplicación internacional. Esto lo sabe muy bien el Nobelado involucrado en estas pretendidas reformas estadísticas, las mismas reformas. que actualmente sugieren poner en práctica algunos gobiernos hora por ingenuidad, ora por otras causas que no debatiremos por ahora.
Lo cierto es que hay convenientes y bien planificados centros de acopio informativo, como la ONU, y hacia ellos van dichos datos para la consulta general de los países que los soliciten. De esa manera pueden tener bases cuantitativas comparativas mundiales, según los objetivos particulares de cada uno de ellos.
Tengamos claro que ni conocer ni manejar estadísticas nos convierte en matemático ni en científico alguno como tampoco en tecnólogos. Las estadísticas son simples troqueles teóricos susceptibles de recibir diferentes materiales para su correspondientes modelajes. Las es. suelen servir más a sus manejadores que al público en general. Provienen de una Matemática eminentemente burguesa, proburguesa, y son la expresión tecnológica más acabada en materia de lenguaje científico. De allí que haya necesidad de extremar el control ex ante de su tentadora y posible aplicabilidad ya que una estadística en manos inescrupulosas puede dar resultados inesperados e indeseables para los países receptores de semejantes informes.
Lo que viene proponiendo este mensajero de Estocolmo es sencillamente una suerte de “Torre de Babel” (Babilonia o alrededores íntimamente cercanos al actual Irak), por lo menos mientras haya países que manejen datos mediante diferentes métodos y variables, ya que obviamente estaríamos depositando en los mismos archivos una data de estadísticos heterogéneos e incompatibles entre sí.
Pero, además, vivimos en sociedades burguesas cuyo motor predominante, con mayor caballaje potencial, es el LUCRO, el dólar, por extensión. Como esto es así, de poco o nada serviría que un país, por ejemplo, Venezuela que es paternalista hasta los tuétanos, incluya rubros no monetarios en su PIB, salvedad hecha del empleo de un mayor número de funcionarios públicos parasitarios de lo cual ya está hipersaturada la Administración Pública Nacional, salvo que ahora se decida imputar en el propio PIB el monto de las erogaciones por concepto de remuneraciones al personal improductivo. En este aspecto y sin lugar a dudas Venezuela se aseguraría un privilegiado lugar en las estadísticas del nuevo PIB mundial.

martes, 6 de octubre de 2009

Sr. Presidente: El IVA ha sido mal calculado


Manuel C. Martínez M.
06 oct. 09
Nada permanece en reposo, así lo señala la propia Dialéctica Materialista. No confundir “reposo” con equilibrio. Decir que un cuerpo puede permanecer inercialmente en reposo es un expandido error de la Física Burguesa que bien podríamos ventilar en nuevas entregas.
De momento vayamos al punto: La ideología burguesa no sólo separó la sociedad en dos clases fundamentales, burguesía y proletariado, capitalistas y asalariados, sino que logró concientizar a ambas clases con una conciencia predominante y favorable a los intereses de la clase dominante.
En estas sociedades la pobreza se deposita en los trabajadores productivos, y la riqueza burguesa pasa a manos de los empresarios de la producción, de los comerciantes y financistas y de los principales administradores civiles y gobernantes. Esta riqueza suele ser envidiada, e imitados los métodos para su adquisición por parte de la clase trabajadora.
La mediática predominante es harto proburguesa, y la literatura comunista tiende a ser convenientemente minimizada y maquillada de mil maneras. Inclusive las teorías, leyes y principios socialistas y su terminología marxiana terminan sembradas tiesa y ortodoxamente en sus seguidores y defensores.
Es que además de ser en sí misma una literatura contraria a los intereses capitalistas, todas las adecuaciones, las posibles reformas y hasta las necesarias correcciones que históricamente deba sufrir la información comunista original suelen ser rechazadas a primera vista por los propios izquierdistas.
Digamos que hasta los más furibundos defensores de la dinámica social, del cambio sociológico y de la Dialéctica Materialista y del Materialismo Histórico se comportan reaccionariamente cada vez que se asoma alguna objeción contra lo que hayan afirmado Karl Marx o Engels, o Lenin.
A sabiendas de esa incuestionable realidad, aquí, por ejemplo, tenemos el caso de algunas precisiones que modestamente me he permitido hacerle a la Teoría del Capital.
En varias entregas he tocado la revisión del cálculo del salario diario:
http://www.aporrea.org/actualidad/a85543.html
Hemos demostrado que los salarios no son costes de producción:
http://www.aporrea.org/ideologia/a64497.html ,
y recientemente cabo de corregir y desarrollar el verdadero contenido del “capital constante” y del “valor agregado”.
http://aporrea.org/ideologia/a87814.html El contenido de este artículo se vincula con la entrega siguiente:
http://www.aporrea.org/ideologia/a84644.html
En esos dos artículos pretendo demostrar la esterilidad de los trabajadores indirectos de dirección, administración y vigilancia, aunque se ha reconocido que son trabajadores muy útiles en las condiciones de producción actualmente burguesa. Pero macroeconómicamente no son trabajadores productivos ya que no agregan valor nuevo ni viejo y mucho menos plusvalor alguno.
En este último trabajo se destaca el significativo hecho de que el verdadero Producto Interno Neto (Valor Agregado) es menor de lo que han presentado las estadísticas nacionales e internacionales. En estas se considera el Valor Agregado como suma de todos los sueldos y salarios con lo cual se da por sentado que un gerente empresarial es tanto o más importante productivamente que un obrero de planta, y se niega su carácter de capital constante. Como se infiere, este capital constante, contabilizado como capital variable, sólo adultera el costo total de producción, infla de partida el precio final de las mercancías y le complica la vida al trabajador en su condición de consumidor final, porque este paga un sobreprecio en cada mercancía con lo cual resulta indebida y excesivamente pechado sobre un Valor Agregado que ya sale inflado desde la fábrica.
O sea que como ahora se puso de moda pechar el consumo mediante el IVA (Impuesto al Valor Agregado), de perogrullo los verdaderos trabajadores no sólo dejan ganancias patronales (plusvalor o capital agregado), no sólo apoyan a un personal gerencial no productivo, sino que se ven obligado a pagar un impuesto por un IVA, por un “valor agregado” mal calculado”, que realmente es menor de lo que las empresas capitalistas declaran en sus estados financieros.

domingo, 4 de octubre de 2009

La “Inteligencia Emocional” o Inteligencia Vulgarizada


Manuel C. Martínez M.
04 oct. 09
Semánticamente, “La inteligencia permite elegir las mejores opciones para resolver una cuestión”. (Wikipedia, pássim). Es una definición bastante amplia, y sobre ella apoyaremos nuestras presentes consideraciones.
La vulgarización de cualquier fenómeno, cosa, concepto, experimento, etc. Significa su popularización. De esa manera lo que elitistamente pertenecía a un grupo de personas se pone a la orden de las mayorías, e independientemente de su grado o coeficiente intelectual. Precisemos que cualquier Coeficiente Intelectual (CI) sólo mide capacidades intelectuales ya vulgarizadas por los propios mensuradores o “testistas”.
Precisamente, los basamentos económicos que cotidiana y milenariamente aplican con eficacia los fenicios y sus descendientes, los comerciantes tanto otrora como ahora, son métodos de relaciones sociales periféricas (no estructurales) que están al alcance de todas las personas que siguen respondiendo a una buena carga genética de rasgos primitivos, de egoísmos, de viveza criolla, de ventajismos, de espuelas largas, de pillerías y tartufismo.
Esas relaciones son comunes para todos los mercaderes, son de vieja data, y quien no aplique todas o algunas de esas argucias comerciales, industriales o financieras, de baja, mediana y alta gerencias, sale del juego, por quiebra o ruina inminente, o, en el mejor de los casos queda condenado a conservar su pobreza comercial de pobre y pueblerino bodeguero, de tal manera y si se inicia como quincallero y carece de “inteligencia emocional”, como tal termina sus días cristiana, judaica o musulmanamente.
Desde los años noventas se introdujo en el mercado burgués el libro La Inteligencia Emocional, y luego apareció: “La Inteligencia E. Aplicada a las Empresas” (burguesas). Se trata de sendos panegíricos en favor de semejantes artilugios psicológicos,. En ellos se echa a un lado la capacidad académica, y lo peor, se conceptúa la inteligencia como una vulgar y primitiva o innata capacidad para ganar amigos, ganar dólares o para que el politicastro se salga con la suya, y para que el más pirata parlanchín aparezca en los escenarios de la demagogia. Tal es la mentira que tanto ha privado en la humanidad desde que algunos de sus integrantes optaron por mercadear y otros por ser consumidores.
La inteligencia no es programable ni mucho menos pedagogizable. Tampoco admite mediciones psicológicas ya que cada cabeza privilegiada de un ser inteligente siempre es una experiencia nueva, inédita y de perogrullo insólita. e insólita. La distinción entre IE e I. Académica es pura mercadotecnia. A nadie se le puede enseñar cómo debe configurara sus neuronas. Sugiero leer la entrega siguiente:
El CLONAJE ANTIIDIOTAS
La apropiación privada y sectaria del poder económico, social, cultural e ideológico les ha garantizado siempre a los poderosos de turno la disponibilidad de amplias facultades para adquirir por trueque, por compraventa o por la fuerza todo tipo de bienes materiales e inmateriales.
Por ejemplo, han secuestrado y recibido como botín a personas dotadas de acervo cognoscitivo e inteligencia superior. Así lo hicieron los romanos con los griegos, y lo hizo el papá de Alejandro Magno con Aristóteles, quien fungió de preceptor de ese afamado conquistador. También EE UU se repartió leoninamente, y con la URSS, la plantilla de científicos de punta, quienes a la sazón trabajaban para Hitler en la elaboración de las primeras bombas termonucleares, justo después que los capos del fascismo fueron vencidos por los aliados del terror angloyanqui.
Pero hasta allí ha llegado el ecuménico y suprapoder de los antisociales de siempre: Anteayer, esclavistas; feudales, ayer; hoy, salaristas.
Ocurre que, como ningún fenómeno es cerrado ni completo, siempre ha habido un bien incompartible, inasequible, inadquirible, incomprable, inexpropiable, intransferible, amercantilizable, inendosable e insintetizable. Hay bienes que no están disponibles en ningún mercado, como la exquisita y sui géneris belleza de alguna mujer.
Hablamos de la inteligencia humana, del talento, valores estos y hasta ahora que sólo azarosamente aparecen depositados en los seres humanos, sin ninguna obediencia a diferenciaciones de ningún tipo, porque se trata de paquetes neuronales de intrincadas configuraciones no comprobadamente hereditarias, cual variable aleatoria o probabilística, y supuestamente inclonable.
Este es el punto: Tal sería, a nuestro juicio, el objetivo final de los ensayos que viene realizando la moderna Genética. Todo comenzó en mamíferos con la oveja Dolly. Es que , así como los homosexuales masculinos han soñado y suspiran por salir encinta para consumarse como hembras, asimismo, quienes ostentan fortunas y poder sobre los demás no han podido tener, ni comprar todavía con todos sus dólares hijos de inteligencia superior. Estos suelen aparecer en los vientres de cualquier persona con absoluta independencia de sus condición socioeconómica.
El error de los genetistas del CLONAJE (que los convierte en timadores in vitro) es que, por idénticos que sean los paquetes genéticos, ningún clon garantizará que la estructura neuronal y combinatoria del cerebro configurará necesariamente la misma inteligencia del original. Ésta es inverosímilmente duplicable. Hasta ahora, dos gemelos normales se parecen muchísimo entre sí y en todo, menos en su cerebro, aunque con ínfima <> para este suceso..
Podríamos también hopotetizar que cada espermatozoide de las miríadas lanzadas en cada eyaculación porta una exclusiva configuración cerebral de las otras tantas miríadas heredadas del arcano árbol genealógico que se halla presente en cada progenitor. Verdaderamente, que sea el espermatozoide o el óvulo portadores de una inteligencia privilegiada procedente de algún pariente de atrás, es simplemente un asunto que sólo la probabilidad en juego puede resolver.
Por supuesto, para ningún magnate de las finanzas puede ser de su agrado que su *cachifa* dé a luz un hijo de inteligencia superior a todos los suyos propios, y, para evitar esa <> sociogenética, han estado haciendo lo imposible para el logro sintético de un cerebro humano, que, a la luz de estas inferencias, bien pudiera resultarle perfecta y artificialmente tarado. Tomado de www.all.at/sadelas